El contrato entre el Ayuntamiento y Semura Bus contemplaba subir hoy, primer día de marzo, el billete a 1,10€ hasta llegar a 1,50 en próximos año
IU
denuncia que el problema de fondo está en el contrato firmado por la Alcaldesa
en contra de los intereses de los zamoranos
En la última Comisión Informativa, el PP
retiró el expediente que subía el billete a 1 euro, y contemplaba pagarle una
liquidación por atrasos a la concesionaria de 18.621€.Es evidente que la
empresa exigirá que se cumpla el contrato. Y lo exigirá respecto a la subida
del billete, ya que el contrato firmado entre el Ayuntamiento y Semura Bus lo
elevaba a 1 euro en 2014 y a 1,10 euros
a principios de marzo de 2015.
No cumplir el contrato, como ha dicho el
Portavoz del PP y no subir el billete ni en 2014 ni en 2015, y dejarlo en los 0,90€
actuales que corresponden al año 2013, acabará
inevitablemente en el Juzgado o en un modificado del contrato para aumentar la
subvención a la empresa. Lo que oculta el PP, respecto del contrato es lo
siguiente:
Liquidación hecha a Semura Bus
|
1. La revisión de precios (que se
retiró del orden del día) concretaba un abono a Semura Bus de 18.621€, cifra
producto de restar lo recaudado por el billetaje de los viajeros previstos en
el Estudio Económico realizado, con una proyección a 10 años, menos los
viajeros reales multiplicados por 0,15€ (ver documento que reproducimos). O dicho en otras palabras: el déficit que
se pudiera producir en estos años respecto de lo previsto se lo reparten entre
el Ayuntamiento (15%) y empresa (75%). Lo mismo se contemplaba en el
contrato en el caso de que hubiera ganancias respecto de la proyección.
2. Si el primer día de marzo de 2015
el Ayuntamiento sigue sin subir el billete, según lo previsto en el contrato, y
los viajeros no aumentan, la empresa volverá a tener un desequilibrio económico
mayor al que tendrá que hacer frente en parte el Ayuntamiento. Por eso si a lo largo de los diez años no
se sube el billete, la empresa caería en un desequilibrio provocado por
decisiones políticas que irremediablemente acabaría en el Juzgado con condena
en costas para el Ayuntamiento; o bien, un modificado del contrato para
aumentar considerablemente la subvención anual que aporta el Ayuntamiento.
3. Respecto del número de viajeros que montan en el autobús, estos datos zanjan la polémica y dejan en mal lugar al Portavoz
Francisco Javier González. La recaudación queda claro que bajó un 20% respecto
de lo previsto, y aún más sobre los últimos datos aportados por la anterior
concesionaria Aurza. Y ello debe servir como quía para una actuación futura del
cualquier equipo de gobierno. No puede
aceptarse una caída de los viajeros año tras año, y hay que perseguir el uso
intensivo del servicio.
En
resumen:
el contrato firmado fue un grave error
político de la Alcaldesa por contemplar subidas en el billete hasta llegar a
1,50€. El incumplimiento del contrato provoca que la empresa entre en pérdidas,
lo que ocasionará problemas legales a corto plazo. Intentar, vía contrato, que
en los próximos años lo recaudado por billetes sea igual al coste del servicio
fue un claro error de cálculo, ya que se ha visto que ello ha provocado, y
seguirá provocando, una caída en la demanda.