IU presenta una Moción en apoyo de la concesión de asilo político al activista saharaui Hassana Aalia
El pasado 19 de enero se hizo público el auto de
resolución de la solicitud de Asilo Político en España del joven activista
saharaui Hassana Aalia, en el que se le comunica la denegación de la protección
y se le anuncia la salida obligatoria del territorio español, dándole un plazo
de 15 días para hacerlo, pese al castigo que le espera y el riesgo real de ser
torturado si regresa al Sahara Occidental bajo ocupación de Marruecos.
Hassana es un joven saharaui de 26 años nacido en El
Aaiún que solicitó protección internacional en enero de 2012, tras enterarse de
que su nombre figuraba en la relación de acusados que iban a ser juzgados en
Rabat por un Tribunal Militar por los hechos del campamento de Gdeim Izik. Hassana estaba en ese momento en España, no
por estar perseguido por su activismo en favor de la causa saharaui, sino para
estudiar con una beca que le fue concedida en el País Vasco para aprender
español. La ley española que regula las condiciones para la solicitud de
asilo político establece cláusulas y plazos excepcionales cuando las
circunstancias que justifican la petición se deban a causa sobrevenida en el
país de origen, como ha sucedido en este caso.
Hassana Aalia figura en el Sumario de Instrucción del
Tribunal Militar Permanente para la Fuerza Armada del Reino de Marruecos, junto
con otros 24 acusados, todos civiles. Fue juzgado en rebeldía y a tenor de su
condena a cadena perpetua en una sentencia que fue leída ante observadores de
Human Rights Watch y Amnistía Internacional, entre otros, existen sobrados
motivos para determinar que el retorno de Hassana al Sahara Occidental
supondría un riesgo real para su integridad física.
Pero el Ministerio del Interior ha denegado su petición,
a pesar de que contaba con un contundente informe de ACNUR, que apoyaba la
solicitud en virtud de las circunstancias excepcionales de Hassana, reconociendo su activismo, las detenciones
que ha sufrido, los malos tratos, el acoso y la presión a la que ha sido
sometido por parte de la policía marroquí, y la tortura de la que ha sido
objeto. La primera vez que fue torturado tuvo lugar en octubre de 2005,
cuando tenía 17 años, por participar en una manifestación pacífica a la salida
de la escuela. Estuvo dos días retenido y, según declaró
Hassana, “los maltratos comenzaron en la misma calle donde fui arrestado y
siguieron dentro del vehículo. Ya en comisaría, me desnudaron, me colgaron boca
abajo durante varias horas y no me dejaron beber agua”.
Interior le ha denegado la protección internacional porque en la
sentencia escrita no figura su nombre entre los condenados, aunque los observadores internacionales
confirmaron que sí fue nombrado en la sala cuando se leyó el veredicto a cada
uno de los acusados. Por esta razón, el
Estado español considera que hay un procedimiento penal inconcluso y,
aunque no lo dice expresamente, en el fondo está avalando la validez de un
juicio que ha sido denunciado por las más importantes organizaciones
internacionales de defensa de los Derechos Humanos por no ofrecer garantía
alguna a los procesados.
Por
todo ello, se propone al Pleno de la Diputación de Zamora la aprobación del
siguiente acuerdo:
1. Exigir al Ministerio de
Interior del Gobierno de España que en virtud de la legislación española y del compromiso de nuestro país con el respeto
a los Derechos Humanos conceda Asilo Político a Hassana Aalia, activista
saharaui de Derechos Humanos y defensor del derecho de autodeterminación del
Pueblo Saharaui reconocido por la legislación Internacional, dado que su
retorno al Sahara Occidental supone un riesgo real para su integridad física.
2. Remitir de forma
inmediata esta solicitud al Ministerio del Interior para que la lleve a efecto.