IU denuncia
que la desidia municipal olvidando los proyectos ha provocado esta situación
La asociación de vecinos de alviar (alberca, villarina y arenales)
ha reclamado sus derechos de comunicación con la ciudad. Defiende romper el
aislamiento, histórico es verdad, pero muy agravado con las últimas decisiones
municipales. Es una zona pequeña, modesta, de gente humilde. No tiene votos
suficientes para ponerlos encima de la mesa del consistorio. Pero tiene
derechos. Primero como barrio, pero también como víctima de las últimas
decisiones municipales que lo han acordonado como si fuera un gueto. Cardenal
Cisneros y el AVE son la soga que les oprime. IU propone soluciones
No puede admitirse que una zona de Zamora como Alviar, compuesta
por tres pequeños barrios (la Alberca, la Villarina y Arenales), sea víctima de
las infraestructuras del progreso. La llegada del AVE ahora, y antes Cardenal
Cisneros, acorralaron la zona marginándola hasta ser periferia de la periferia
y cortando las vías de comunicación.
El problema lo tenemos hoy, ya que ayer en realidad sí se pensaron
medidas para conectar Alviar con la ciudad. La crisis se llevó muchas propuestas
por delante, como las conexiones previstas con el Barrio. En este artículo
reivindicamos su necesidad de conexión y recordamos la desidia municipal, que
no tomó medidas en lo que se refiere al AVE y demostró rapiña y egoísmo en lo
que se refiere a Cardenal Cisneros.
La conexión
de Alviar con Cardenal Cisneros
Cardenal Cisneros fue en principio un muro para Alviar. Con el
tiempo se ideó una buena solución que partía de los 26.000 m2 que tenía el
Ayuntamiento entre la Autovía y la Alberca, en los que se iban a hacer 250
pisos por la mercantil Proinsa, que nunca se hicieron al dar de quiebra.
La idea era hacer una gran avenida que enlazara la rotonda que el
Ayuntamiento realizó en Cardenal Cisneros de forma previa (y que costó nada
menos que 300.000€) con la Calle Arañuelos en la zona del barrio. Esta avenida
tendría continuidad hasta enlazar con la Carretera de Villalpando. De hecho, a
día de hoy puede verse una gran calle abandonada de la urbanización que comenzó
a hacer Proinsa, con aceras, farolas y una calzada llena de hierba y cardos.
El
Ayuntamiento abandonó la urbanización comenzada
Proinsa dio de quiebra, pero este hecho supuso un gran negocio
para el Ayuntamiento. La constructora compró al Ayuntamiento las parcelas de
26.000 m2 de edificabilidad para hacer 250 pisos al precio muy estimable de
5.300.000€. En ese precio se incluía hacer la urbanización de calles y soterrar
la línea eléctrica de alta tensión. De los 5.300.000€, Proinsa ingresó en las
arcas municipales 3.250.000€, y el resto, es decir 1.950.000€, los invertiría
en la urbanización y en el soterramiento de la línea eléctrica.
La crisis se llevó por delante a esta empresa, que abandonó la
urbanización a medio hacer. Las Cajas de Ahorros rápidamente fueron a por las
parcelas como acreedores de la empresa. Las denuncias de IU, que urgentemente
advirtió a la opinión pública y al Ayuntamiento, provocaron que se solicitara
la reversión de las parcelas al Ayuntamiento por incumplimiento de contrato por
no haber hecho los pisos de protección oficial. El Ayuntamiento tuvo éxito
porque se quedó con todo el dinero y además logró quedarse con las parcelas en un
proceso judicial.
La conclusión de IU es que el Ayuntamiento no se puede comportar
con egoísmo y rapiña. La urbanización que quedó a medias, y en la que Proinsa
dejó más de un millón, debe completarse por mero raciocinio y, entre otras
cosas, porque conectaba Alviar con Cardenal Cisneros a través de una avenida
que se encuentra hecha en su parte fundamental. Son 300 metros que hay que
rellenar con asfalto con un coste de unos 200.000€.
La inversión no es cuantiosa si tenemos en cuenta que el
Ayuntamiento se quedó con el dinero de Proinsa, con las parcelas y con más de
300.000€ de fianza. Hay que completar esa vía hasta conectar Cardenal Cisneros
con la Calle Arañuelos. El Ayuntamiento está políticamente obligado.
La pasarela
que se hizo sobre el AVE en las Llamas
Con la llegada del AVE a Zamora, IU propuso el soterramiento de
las vías desde el Puente del Valderaduey, en Villagodio. Pero el presupuesto
mandaba. En 2001 el Ayuntamiento, para permeabilizar los barrios del norte y
del sur, propuso la construcción de una pasarela en las Llamas en el lugar que
se utilizaba como paso a nivel para vehículos y peatones.
Dicha pasarela se construyó con una sección de 20 metros. El
problema es que se hizo con unos accesos provisionales sin aceras y muy
estrechos, pensando que se completarían de forma efectiva con los desarrollos
urbanísticos a ambos lados de las vías.
Pero esos desarrollos no van a llegar nunca. El Plan de Urbanismo
diseñaba una ciudad de 170.000 habitantes, cuando Zamora aparece estancada en
población desde hace muchos años.
En ese momento IU dio la voz de alarma, pero desde el Ayuntamiento
no se hizo caso. Se permitió construir una amplia pasarela que se estrechaba
como un embudo en su desembarque en el Camino de las Llamas a un lado y en el
Camino del Torrao al otro. Un coche sube, aunque con amplia pendiente ya que se
trata de una subida provisional; una persona tiene que subir por la misma
calzada que el coche, con gran peligro para la seguridad de los peatones
teniendo en cuenta el volumen de tráfico que tiene la pasarela.
La pasarela
del Convento de las Claras
El Proyecto del AVE también diseñó una pasarela peatonal que
discurría desde el Convento de las Claras, aprovechando el desnivel del
terreno, hasta casi la Carretera de Villalpando. Se trataba de conectar
peatonalmente Alviar y la zona industrial de la Carretera de Villalpando con
los barrios de los Bloques y las Viñas, entre otros.
Los ajustes del AVE se la llevaron por delante. Se trataba de una
pasarela de 200 metros que permeabilizaría peatonalmente la zona. EL AVE tuvo
recortes en la propia Estación, o dejando de momento una sola vía, lo cual
augura malos presagios en el futuro.
IU reivindicó de forma contundente esta pasarela. El AVE rompe la
ciudad desde su entrada por Villagodio. Es un muro infranqueable. El Plan de
Urbanismo que preveía desarrollos urbanísticos a ambos lados, se convierte en
mero proyecto irreal ¿Cómo va a crecer por el este la ciudad, a ambos lados de
las vías, si éstas suponen un muro infranqueable?
La
Asociación de vecinos se queja con razón
Esta falta de conexión de Alviar, provocada por dos grandes
infraestructuras, ha sido puesta de manifiesto por la Asociación de Vecinos.
Tienen razón, y algo habrá que hacer desde el Ayuntamiento.
El Ayuntamiento tiene la obligación de acometer la conexión con
Cardenal Cisneros. Obtuvo el dinero para ello y tiene que ser generoso con un
barrio de la periferia marginado desde siempre.
A su vez tiene que exigir a Adif / Renfe que retome el proyecto
desde el Convento de las Claras y la construcción de aceras en la Pasarela de
Las Llamas.
Alviar no merece la incompetencia del PP. El tema debió arreglarse
en su momento. Pero los errores hay que admitirlos, y después corregirlos. Sra.
Alcaldesa, Alviar necesita conexiones.